sábado, 4 de octubre de 2014

Las Vanguardias y los grandes poetas

 

Introducción

Las vanguardias hispanoamericanas suelen situarse entre 1930 y 1950. Las vanguardias nacieron en la Europa de entreguerras, en los "felices" y frágiles años veinte. Se denominaron vanguardias a distintas corrientes, muy efímeras, que se caracterizaban por el deseo de revolucionar el arte desde su misma base. Los vanguardistas preconizaban distintas vías de crear el arte, un arte nuevo y original, nunca antes visto. Las vanguardias europeas que afecten a la literatura fueron el futurismo, el dadaísmo y sobretodo el surrealismo. El surrealismo apostaba por la búsqueda de la autenticidad emocional en el subconsciente. Para ello empleaban la escritura automática o sus propios sueños.

Las Vanguardias buscaron

la innovación teórica del arte.

 

Aunque no de forma rigurosa, el surrealismo apareció en escritores españoles y sudamericanos. Aleixandre o Lorca escribieron obras que se pueden denominar surrealistas. Lo mismo sucedería en autores americanos como el Pablo Neruda de "Residencia en la tierra". En conclusión, las vanguardias fueron corrientes de postulados innovadores e incluso radicales que dejaron una huella particular en jóvenes autores de orígenes y obras diversas.

 

Por otro lado, nacieron en Hispanoamérica otros "ismos", autóctonos. El "ismo" americano por excelencia es el "Creacionismo", cuyo promotor fue el Chileno Vicente Huidobro. De España importaría Borges el ultraísmo. Así pues, las resonancias de las innovaciones vanguardistas también afectaron a los poetas hispanoamericanos.

 

Características generales

La característica definidora de las vanguardias es la fragmentación en numerosos "ismos" o tendencias que, generalmente mediante manifiestos, establecían "un modo de hacer literatura". Así podemos encontrar varias escuelas con características propias.

 

En segundo lugar decir que mientras unos autores se mantuvieron más o menos fieles dentro de una vanguardia o "ismo", otros poetas tan sólo tomaron algunos ecos, especialmente del surrealismo, dejándose influir sólo parcialmente.

 

Creacionismo, ultraísmo y otros "ismos"

De todos los vanguardismos el surrealismo fue el que más seguidores encontró en el sur de América. En Argentina se formó un grupo liderado por Aldo Pellegrini (1903-1973), y posteriormente destacaron Alberto Girri (1918-1991), Raúl Gustavo Aguirre (1927), o Enrique Molina (1910-1996). Muy próximos a la estética surrealista, escribieron en Chile Braulio Arenas (1913) y Gonzalo Rojas (1917). En Cuba cabe citar a Eliseo Diego (1920) y Cintio Vitier (1921). Por su parte, Carlos Pellicer (1899-1976) recorrió casi todos los "ismos".

  

 

Un "ismo" americano es el "Estridentismo". Nació y murió en los años veinte en México, con poetas como Manuel Maplés Arce (1900-1981). Pero el gran movimiento fue el "Creacionismo". Según esta vanguardia, la literatura no debe imitar a la naturaleza, sino crear dentro de sí misma, del propio texto, una naturaleza propia y nueva. El nombre del creacionismo es Vicente Huidobro (1893-1948), chileno autor de Altazor. Seguidores de Huidobro fueron en España Juan Larrea y Gerardo Diego. Jorge Luis Borges (1899-1986), en su visita a España, conoció una vanguardia española, el ultraísmo, de Guillermo de la Torre y Cansinos Asséns. El ultraísmo es la vanguardia de la imagen fantástica e insólita. Ya en Argentina, Borges dio al ultraísmo un toque autóctono denominándolo "criollismo". Dentro del ultraísmo comenzó la obra de Salvador Novo (1904-1974).

    

Los grandes poetas del siglo XX

En la primera mitad del veinte publican en Sudamérica poetas posmodernistas, poetas "de la negritud", poetas "puros" y vanguardistas. Junto a ellos, publicaron tres poetas de obras muy personales, de una calidad literaria excepcional, que recibieron varias influencias, especialmente de una vanguardia, el surrealismo.

 

Comenzaremos por citar al peruano César Vallejo (1892-1938). Comenzó con una poesía modernista, al estilo de Darío, pero siempre desde un nuevo punto de vista muy innovador. En 1922, con Trilce, supera el modernismo y es influido por las vanguardias. Ésta es su obra maestra. Con exquisitez, construye un poemario complejo y distorsionado.

 

Uno de los poetas más leídos y renombrados de todo el siglo es el chileno Pablo Neruda (1903-1973). Su primer gran poemario es Veinte poemas de amor y una canción desesperada. Se trata de un poemario amoroso que, sin un lenguaje vanguardista, logra componer un libro innovador y a la par tradicional en los temas amorosos. Dejan también en él huella las vanguardias, como en Residencia en la tierra y también los temas sociales, como en Canto general. Se podría de decir que todos estos poemarios, de tendencias distintas, guardan en común la universalidad de un autor sobresaliente.

 

Quizás la obra más trascendente y destacable de la poesía hispanoamericana sea la de un mexicano, Octavio Paz (1914-1998). Su poesía se centra en el origen del conocimiento y la realidad, en el nacimiento de las propias palabras. Su poesía es existencial y de una calidad literaria apabullante.

 

Surrealismo y realismo magico

Gabriel García Márquez.

 

El realismo mágico es la respuesta latinoamericana a la literatura fantástica de mediados del siglo XX. Entre sus principales exponentes están Gabriel García Márquez de Colombia, y Alejo Carpentier de Cuba. El realismo mágico es la preocupación estilística y el interés de mostrar lo irreal o extraño como algo cotidiano y común. Una alteración de la realidad a través del mito (myth). El realismo mágico se vale de los elementos culturales de las culturas nativas, indígenas, del folklore, de los mitos de American Latina. Estos elementos culturales se mezclan con temas bastante profundos como la soledad, la incapacidad del amor de explicar la existencia humana, y el fatalismo (the importante of fate).  

 

Por otra parte, el realismo fantástico, trata de entender y explicar la realidad extra sensorial, o sea, la realidad que existe más allá de lo que percibimos con nuestros sentidos. Es una tendencia ontológica (phylosophical examination of what it means to be human).

El elemento indígena o nativo no existe con tanta fuerza en el realismo fantástico porque, en países como Argentina, hubo una tradición cultural europea mayor y el elemento indígena fue menor. Los escritores del Cono Sur son más representativos de esta forma literaria. (Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Ernesto Sábato). Estos escritores expresan, en algunas de  sus obras, tendencias existencialistas y metafísicas. Ellos quieren entender la condición humana desde una perspectiva más filosófica.

 

El realismo mágico y el realismo fantástico fueron influenciados por el surrealismo figurativo europeo.

 

Por ejemplo el cuento “Un señor muy viejo con unas alas enormes de García Márquez es representativo del realismo mágico y el cuento “La noche boca arriba” de Julio Cortázar tiene elementos que se acercan más al realismo fantástico.

 

El Boom Latinoamericano:

 

Cortázar y García Márquez pertenecen a este movimiento literario que empezó hacia 1960. Se le conoce como el Boom latinoamericano porque la novela latinoamericana alcanzó un alto nivel estético tanto en contenido como en su en su técnica narrativa. Los escritores del Boom se reconocieron en la literatura a nivel universal y entraron a formar parte del  grupo de los escritores modernos europeos (como Wolf, Joyce, Faulkner, Kafka, Checkov, etc).

 

Fecha importante:

 

Entre 1926 y 1932 empieza el declive de la narrativa nativista, naturalista e indigenista. Hacia 1940 hubo una ola de inmigración de intelectuales europeos hacia América Latina debido a la caída de la República Española, el ascenso de Franco al poder, y la Segunda Guerra Mundial principalmente. Estos intelectuales tuvieron cierto efecto en la producción literaria, porque trajeron tendencias europeas con ellos (Recuerden a André Breton y el surrealismo, entre otros). También hacia 1940 Jorge Luis Borges estaba traduciendo a Virgina Wolf , Franz Kafka y a William Faulkner.

 

 

 

El surrealismo:

 

Dice Alejo Carpentier que el surrealismo significó mucho para los escritores latinoamericanos de esta época porque les mostró texturas y aspectos de la vida americana que habían sido inadvertidos.

 

Otros aspectos del surrealismo en la literatura del Boom latinoamericano:

 

-La actitud hacia el hombre y el alma es irracionalista. Es decir, no se encuentran argumentos racionales para explicar el significado de la existencia del ser humano.

 

-       Se le da mucha importancia a los sueños.

-       Se le da importancia a lo azaroso (unfortunate) de la conducta humana.

-       Se da importancia a la visión desintegradota (desintegrated) de la realidad. La realidad es posiblemente ficticia.

-       Exploración de la condición humana y la angustia del ser humano contemporáneo.

-       La mitificación de la realidad (Turn reality into a myth)

-       Énfasis en lo ambiguo, lo irracional, y lo misterioso de la realidad.

-       La realidad es posiblemente ficticia.

 

 

 

TEMAS:

 

El fatalismo y el inmovilismo.

Se desconfía en el concepto del amor y se enfatiza la soledad del individuo

La muerte no tiene tanto valor porque el mundo es aún más difícil e incomprensible.

Se le quita el valor a los tabúes religiosos y sexuales, y hay mayor importancia a explorar los aspectos secretos y demenciales de la mente y la conducta.

 

 

 

 

 

 

Cuales son la caracteristicas del surrealismo en la literatura?

En el terreno literario, el surrealismo supuso una gran revolución en el lenguaje y la aportación de nuevas técnicas de composición. Como no asumía tradición cultural alguna, ni desde el punto de vista temático ni formal, prescindió de la métrica y adoptó el tipo de expresión poética denominado como versículo: un verso de extensión indefinida sin rima que se sostiene únicamente por la cohesión interna de su ritmo. Igualmente, como no se asumía la temática consagrada, se fue a buscar en las fuentes de la represión psicológica (sueños, sexualidad) y social, con lo que la lírica se rehumanizó después de que los ismos intelectualizados de las Vanguardias la deshumanizaran, a excepción del Expresionismo. Para ello utilizaron los recursos de la transcripción de sueños, la escritura automática y engendraron procedimientos metafóricos nuevos como la imagen visionaria. El lenguaje se renovó también desde el punto de vista del léxico dando cabida a campos semánticos nuevos y la retórica se enriqueció con nuevos procedimientos expresivos.

En Hispanoamérica el surrealismo contó con la adhesión entusiasta de poetas como el chileno Braulio Arenas y los peruanos César Moro, Xavier Abril, y Emilio Adolfo Westphalen, además de influir decisivamente en la obra de figuras mayores como Pablo Neruda, Gonzalo Rojas y César Vallejo. En Argentina, pese al desdén de Jorge Luis Borges, el surrealismo sedujo aún al joven Julio Cortázar y produjo un fruto tardío en la obra de Alejandra Pizarnik. Se ha señalado también su influencia en otros autores de producción más reciente, como el músico Alejandro de Michele. El poeta y pensador mexicano Octavio Paz ocupa un lugar particular en la historia del movimiento: amigo personal de Breton, dedicó al surrealismo varios ensayos esclarecedores.

Source:

El Surrealismo entre Viejo y Nuevo Mundo. Madrid : Quinto Centenario, 1990.

 

jueves, 2 de octubre de 2014

EL CUBISMO, definicion y breve perspectiva

El cubismo es una escuela y teoría estética de las artes plásticas y el diseño. Se caracteriza por la utilización de las formas geométricas, como los cubos, los triángulos y los rectángulos.

El movimiento nació en Francia y tuvo su apogeo entre 1907 y 1914. El término cubismo proviene del vocablo francés cubisme, que fue propuesto por el crítico Louis Vauxcelles. Este especialista hacía referencia a los cubos que aparecían en las pinturas de artistas como Pablo Picasso, Juan Gris y Georges Braque, entre otros exponentes del cubismo.

A partir de esta escuela estética se desarrollaron otras vanguardias europeas que revolucionaron el panorama artístico del siglo XX. Sin embargo, el cubismo está considerado como una vanguardia pionera ya que se encargó de romper con la perspectiva, el último principio renacentista que seguía vigente a comienzos de siglo.

Los cubistas buscaban descomponer las formas naturales y presentarlas mediante figuras geométricas que fragmentaban las superficies y las líneas. Esta perspectiva múltiple permitió, por ejemplo, reflejar un rostro tanto de frente como de perfil, ambos a la vez.

Otra característica del cubismo es la utilización de colores apagados como el verde y el gris, sobre todo en la primera época del movimiento. Con el tiempo, los cubistas comenzaron a incorporar colores más vivos.

Cabe destacar que, más allá de la pintura, el cubismo llegó a la literatura. Los caligramas combinan la poesía con los dibujos, al organizar el texto de una manera particular. El poeta francés Guillaume Apollinaire fue uno de los principales creadores de caligrama.

Entre otros nombres fundamentales del movimiento podemos citar a Juan Gris, Jean Metzinger, Albert Gleizes y Fernand Leger.

Diferentes fases del cubismo

Como punto de partida del movimiento podemos señalar “Las señoritas de Avignon” de Pablo Picasso, en 1907. Desde entonces, el cubismo planteó una nueva forma de arte; donde forma, perspectiva, movimiento y espacio eran protagonistas pero eran comprendidas de una forma estética muy diferente a la hasta entonces conocida. Se trataba de un arte mental, es decir que se desliga de la interpretación o la semejanza a la naturaleza.

Es importante señalar que fue esta la primera vanguardia que apareció en el arte gráfico, que se opuso rotundamente al movimiento en auge del momento, el Renacentismo donde se le daba una importancia fundamental a la perspectiva. En el cubismo, esta desapareció y se fragmentó en líneas y superficies; esta nueva forma de comprender la perspectiva recibió el nombre de perspectiva múltiple. Ya no existe un único punto de vista ni tampoco hay sensación de profundidad ni detalles.

En este movimiento existen dos fases bien diferenciadas:

* Cubismo Analítico: se lo conoce también como cubismo puro y es el más complejo de comprender. Se basa en la descomposición de formas y figuras geométricas para analizarlas y reordenarlas de una forma diferente y descompuesta.

* Cubismo Sintético: le siguió a la corriente anterior y se basó en la recomposición de los objetos, es decir ya no en el análisis detallado de sus formas, sino en captar la esencia de su fisonomía. Estos artistas resaltaban a través de colores y formas predominantes las partes más significativas de la figura. En esta etapa surgió la técnica del collage y el uso de elementos de la vida cotidiana permitiendo ofrecer una imagen global ofreciendo un referente concreto.

Por último cabe añadir que la aparición de la fotografía en escena fue fundamental para la liberación absoluta del arte gráfico. Al representar de forma más exacta que la pintura la propia realidad, permitió que ésta pudiera volverse más abstracta, al quitarle el peso de tener que representar las cosas tal cual aparecen en la realidad para transcribirlas.


Lee todo en: Definición de cubismo - Qué es, Significado y Concepto http://definicion.de/cubismo/#ixzz3F01mBmtF

 

PRIMER MANIFIESTO DADA (1918)

Tristan Tzara

Escrito por Tristan Tzara y publicado en 1918 en el número 3 de la revista DADA de Zurich, el Manifiesto Dada es el primer manifiesto del movimiento dadaísta. Otros textos importantes para la historia del dadaísmo son: el Manifiesto sobre el amor débil y el amor amargo, también de Tzara, leído en París el 12 de diciembre de 1920 en la Galería Povolozky y publicado posteriormente en el número 4 de la revista La vie des lettres también de París y la plaquette de ocho folios sin numerar La premiere aventure celeste de Mausleur Antipyrine, que Tzara escribió y publicó en Zurich en 1916. Ahora bien, el manifiesto de 1918 es sin duda alguna el texto más significativo de los que publicó el artista rumano y el más explícito en sus intenciones.

  La magia de una palabra

     —DADA— que ha puesto a los periodistas

     ante la puerta de un mundo

     imprevisto, no tiene para nosotros

     ninguna importancia
 

          Para lanzar un manifiesto es necesario: A, B,C.  Irritarse y aguzar las alas para conquistar y propagar muchos pequeños y grandes a, b, c, y afirmar, gritar, blasfemar, acomodar la prosa en forma de obviedad absoluta, irrefutable, probar el propio non plus ultra y sostener que la novedad se asemeja a la vida como la última aparición de una cocotte prueba la esencia de Dios. En efecto, su existencia ya fue demostrada por el acordeón, por el paisaje y por la palabra dulce. Imponer el propio A.B.C. es algo natural, y, por ello, deplorable. Pero todos lo hacen bajo la forma de cristal-bluff-madonna o de sistema monetario, de producto farmacéutico o de piernas desnudas invitantes a la primavera ardiente y estéril. El amor por lo nuevo es una cruz simpática que revela un amiquemeimportismo, signo sin causa, frágil y positivo. Pero también esta necesidad ha envejecido. Es necesario animar el arte con la suprema simplicidad: novedad. Se es humano y auténtico por diversión, se es impulsivo y vibrante para crucificar el aburrimiento. En las encrucijadas de las luces, vigilantes y atentas, espiando los años en el bosque. Yo escribo un manifiesto y no quiero nada y, sin embargo, digo algunas cosas y por principio estoy contra los manifiestos, como, por lo demás, también estoy contra los principios, decilitros para medir el valor moral de cada frase. Demasiado cómodo: la aproximación fue inventada por los impresionistas. Escribo este manifiesto para demostrar cómo se pueden llevar a cabo al mismo tiempo las acciones más contradictorias con un único y fresco aliento; estoy contra la acción y a favor de la contradicción continua, pero también estoy por la afirmación. No estoy ni por el pro ni por el contra y no quiero explicar a nadie por qué odio el sentido común.

DADA— he aquí la palabra que lleva las ideas a la caza; todo burgués se siente dramaturgo, inventa distintos discursos y, en lugar de poner en su lugar a los personajes convenientes a la calidad de su inteligencia, crisálidas en sus sillas, busca las causas y los fines (según el método psicoanalítico que practica) para dar consistencia a su trama, historia que habla y se define. El espectador que trata de explicar una palabra es un intrigante: (conocer). Desde el refugio enguantado de las complicaciones serpentinas hace manipular sus propios instintos. De aquí nacen las desgracias de la vida conyugal.

Explicar: diversión de los vientres rojos con los molinos de los cráneos vacíos.
 

                                      Dada no significa nada

Si alguien lo considera inútil, si alguien no quiere perder tiempo por una palabra que no significa nada….El primer pensamiento que se agita en estas cabezas es de orden bacteriológico…, hallar su origen etimológico, histórico o psicológico por lo menos. Por los periódicos sabemos que los negros Kru llaman al rabo de la vaca sagrada: DADA. El cubo y la madre en una cierta comarca de Italia reciben el nombre de DADA. Un caballo de madera, la nodriza, la doble afirmación en ruso y en rumano DADA.  Sabios periodistas ven en todo ello un arte para niños, otros santones jesúshablaalosniños, el retorno a un primitivismo seco y estrepitoso, estrepitoso y monótono. No es posible construir la sensibilidad sobre una palabra. Todo sistema converge hacia una aburrida
perfección, estancada idea de una ciénaga dorada, relativo producto humano. La obra de arte no debe ser la belleza en sí misma porque la belleza ha muerto; ni alegre; ni alegre ni triste, ni clara ni oscura, no debe divertir ni maltratar a las personas individuales sirviéndoles pastiches de santas aureolas o los sudores de una carrera en arco a través de las atmósferas. Una obra de arte nunca es bella por decreto, objetivamente y para todos. Por ello, la crítica es inútil, no existe más que subjetivamente, sin el mínimo carácter de genera­lidad. ¿Hay quien crea haber encontrado la base psíquica común a toda la humanidad? El texto de Jesús y la Biblia recubren con sus amplias y benévolas alas: la mierda, las bestias, los días. ¿Cómo se puede poner orden en el caos de infinitas e informes variaciones que es el hombre? El principio «ama a tu prójimo» es una hipocresía. «Conócete a ti mismo» es una utopia más aceptable porque también contiene la maldad. Nada de piedad. Después de la matanza todavía nos queda la esperanza de una humanidad purificada. Yo hablo siempre de mí porque no quiero convencer. No tengo derecho a arrastrar a nadie a mi río, yo no obligo a nadie a que me siga. Cada cual hace su arte a su modo y manera, o conociendo el gozo de subir como una flecha hacia astrales reposos o el de descender a las minas donde brotan flores de cadáveres y de fértiles espasmos. Estalactitas: buscarlas por doquier, en los pesebres ensanchados por el dolor, con los ojos blancos como las liebres de los ángeles.

Así nació DADA, de una necesidad de independencia, de des­confianza hacía la comunidad. Los que están con nosotros conservan su libertad. No reconocemos ninguna teoría. Basta de academias cubistas y futuristas, laboratorios de ideas formales. ¿Sirve el arte para amontonar dinero y acariciar a los gentiles burgueses? Las rimas acuerdan su tintineo con las monedas y la musicalidad resbala a lo largo de la línea del vientre visto de perfil. Todos los grupos de artistas han ido a parar a este banco a pesar de cabalgar distintos cometas. Se trata de una puerta abierta a las posibilidades de revolcarse entre muelles almohadones y una buena mesa.

Aquí echamos el ancla en la tierra feraz. Aquí tenemos derecho a proclamar esto porque hemos conocido los escalofríos y el desper­tar. Fantasmas ebrios de energía, hincamos el tridente en la carne distraída. Rebosamos de maldiciones en la tropical abundancia de vertiginosas vegetaciones: goma y lluvia es nuestro sudor, sangramos y quemamos la sed.
Nuestra sangre es vigorosa.

El cubismo nació del simple modo de mirar un objeto: Cezanne pintaba una taza veinte centímetros más abajo de sus ojos, los cubistas la miran desde arriba complicando su aspecto sección perpendicular que sitúan a un lado con habilidad.. me olvido de los creadores ni de las grandes razones de la a. que ellos hicieron definitivas). El futurismo ve la misma traza un movimiento sucesivo de objetos uno al lado del otro, añadiendole maliciosamente alguna línea—fuerza. Eso no quita que la buena o mala, sea siempre una inversión de capitales intelectuales.

El nuevo pintor crea un mundo cuyos elementos son sus mismos medios, una obra sobria y definida, sin argumento. El artista nuevo protesta: ya no pinta (reproducción simbólica e ilusionista), sino que crea directamente en piedra, madera, hierro, estaño, bloques de organismos móviles a los que el límpido viento de las a inmediatas sensaciones hacer dar vueltas en todos los sentidos.

Toda obra pictórica o plástica es inútil; que, por lo u sea un monstruo capaz de dar miedo a los espíritus serviles y no algo dulzarrón para servir de ornamento a los refectorios de esos animales vestidos de paisano que ilustran tan bien esa fabula triste de la humanidad.

Un cuadro es el arte que se encuentren dos lineas geométricas que se ha comprobado que son paralelas, hacer que se encuentren en un lienzo, ante nuestros ojos, en una realidad que nos traslada a un mundo de otras condiciones y posibilidades. Este mundo no esta especificado ni definido en la obra, pertenece en sus innumerables variaciones al espectador. Para su creador la obra carece de causa y de teoría. Orden = desorden; yo = no-yo; afirmación = negación; éstos son los fulgores supremos de un arte absoluto. Absoluto en la pureza de cósmico y ordenado caos, eterno en el instante globular sin duración, sin respiración, sin luz y sin control.

Amo una obra antigua por su novedad. Tan sólo el contraste nos liga al pasado. Los escritores que enseñan la moral y discuten o mejoran la base psicológica, tienen, aparte del deseo oculto del beneficio, un conocimiento ridículo de la vida que ellos han clasificado, subdividido y canalizado. Se empeñan en querer ver danzar las categorías apenas se ponen a marcar el compás. Sus lectores se carcajean y siguen adelante: ¿con qué fin? Hay una literatura que no llega a la masa voraz. Obras de creadores nacidas de una auténtica necesidad del autor y sólo en función de sí mismo. Consciencia de un supremo egoísmo, en el que cualquier otra ley queda anulada.

Cada página debe abrirse con furia, ya sea por serios motivos, profundos y pesados, ya sea por el vórtice y el vértigo, lo nuevo y lo eterno, la aplastante espontaneidad verbal, el entusiasmo de los principios, o por los modos de la prensa. He ahí un mundo vacilante que huye, atado a los cascabeles de la gama infernal, y he ahí, por otro lado, los hombres nuevos, rudos, cabalgando a lomos de los sollozos.

He ahí un mundo mutilado y los medicuchos literarios preocu­pados por mejorarlo. Yo os digo: no hay un comienzo y nosotros no temblamos, no somos unos sentimentales. Nosotros desgarramos como un furioso viento la ropa de las nubes y de las plegarias y preparamos el gran espectáculo del desastre, el incendio, la des­composición. Preparamos la supresión del dolor y sustituimos las lágrimas por sirenas tendidas de un continente a otro. Banderas de intensa alegría viudas de la tristeza del veneno. DADA es la enseñanza de la abstracción; la publicidad y los negocios también son elementos poeticos.

Yo destruyo los cajones del cerebro y los de la organización social: desmoralizar por doquier y arrojar la mano del cielo al infierno, los ojos del infierno al cielo, restablecer la rueda fecunda de un circo universal en las potencias reales y en la fantasía individual.

La filosofia, he ahí el problema: por qué lado hay que empezar a mirar la vida, Dios, la idea y cualquier otra cosa. Todo lo que se ve es falso. Yo no creo que el resultado negativo sea más importante que la elección entre el dulce y las cerezas como postre. El modo de mirar con rapidez la otra cara dc una cosa para imponer directamente la propia opinión se llama dialéctica, o sea, el modo de regatear el espíritu de las patatas frutas bailando a su alrededor la danza del método.

Si yo grito:

IDEAL, IDEAL, IDEAL,

conocimiento, conocimiento, conocimiento

bumbúm, bumbúm, bumbúm,

registro con suficiente exactitud el progreso, la ley, la moral y todas las demás bellas cualidades de que tantas personas inteligentil han discutido en tantos libros para llegar, al fin, a confesar que cada uno, del mismo modo, no ha hecho más que bailar al compas de su propio y personal bumbúm y que, desde el punto de vista de tal bumbúm, tiene toda la razón: satisfacción de una curiosidad morbosa, timbre privado para necesidades inexplicables; baño; dificultades pecuniarias; estómago con repercusiones en la ‘ida; autoridad de la varita mística formulada en el grupo de una orquesta fantasma de arcos mudos engrasados con filtros a base de amoniaco animal. Con los impertinentes azules de un ángel han enterrado la interioridad por cuatro perras de unánime reconocimiento.

Si todos tienen razón, y si todas las píldoras son píldoras Pínk., tratemos de no tener razón. En general, se cree poder explicar racionalmente con el pensamiento lo que se escribe. Todo esto es relativo. El pensamiento es una bonita cosa para la filosofia, pero es relativo. El psicoanálisis es una enfermedad dañina, que adormece las tendencias antirreales del hombre y hace de la burguesía un sistema. No hay una Verdad definitiva. La dialéctica a una máquina divertida que nos ha llevado de un modo bastante trivial a las opiniones que hubiéramos tenido de otro modo. ¿Hay alguien que crea, mediante el refinamiento minucioso de la lógica,, haber demostrado la verdad de sus opiniones? La lógica constreñida por los sentidos es una enfermedad orgánica. A este elemento los filósofos se complacen en añadir el poder de observacion. Pero justamente esta magnífica cualidad del espíritu es la prueba de su impotencia. Se observa, se mira desde uno o varios puntos de vista y se elige un determinado punto entre millones de ellos queue igualmente existen. La experiencia también es un resultado del azar y de las facultades individuales.

La ciencia me repugna desde el momento en que se transforma en sistema especulativo y pierde su carácter de utilidad, que, aun siendo inútil, es, sin embargo, individual. Yo odio la crasa objetividad y la armonía, esta ciencia que halla que todo está en orden: continuad, muchachos, humanidad . . . La ciencia nos dice que somos los servidores de la naturaleza: Todo está en orden, haced el amor y rompeos la cabeza; continuad, muchachos, hombres, amables burgueses, periodistas vírgenes... Yo estoy contra los sistemas: el único sistema todavía aceptable es el de no tener sistemas. Completarse, perfeccionarse en nuestra pequeñez hasta colmar el vaso de nuestro yo, valor para combatir en pro y en contra del pensamiento, misterio de pan, desencallamiento súbito de una hélice infernal hacia lirios baratos.
 

                                    La espontaneidad dadaísta

Yo llamo amíquémeimportismo a una manera de vivir en la que cada cual conserva sus propias condiciones respetando, no obstante, salvo en caso de defensa, las otras individualidades, el twostep que se convierte en himno nacional, las tiendas de antigüallas, el T.S.H., el teléfono sin hilos, que transmite las fugas de Bach, los anuncios luminosos, los carteles de prostíbulos, el órgano que difunde claveles para el buen Dios y todo esto, todo junto, y realmente sustituyendo a la fotografia y al catecismo unilateral.

La simplificidad activa.

La impotencia para discernir entre los grados de claridad: lamer la penumbra y flotar en la gran boca llena de miel y de excrementos. Medida con la escala de lo Eterno, toda acción es vana (si dejamos que el pensamiento corra una aventura cuyo resultado sería infinitamente grotesco; dato, también éste, importante para el conocimiento de la humana impotencia). Pero si la vida es una pésima farsa sin fin ni parto inicial, y como creemos salir de ella decentemente como crisantemos lavados, proclamamos el arte como única base de entendimiento. No importa que nosotros, caballeros del espiritu, le dediquemos desde siglos nuestros refunfuños. El arte no aflige a nadie y a aquellos que sepan interesarse por el recibiran, con sus caricias, una buena ocasión de poblar el pais con su conservación. El arte es algo privado y el artista lo hace para si mismo; una obra omprensible es el producto de periodistas.

Y me gusta mezclar en este momento con tal monstruosidad los colores al mezclar en este momento con tal monstruosidad los colores al oleo: un tubo de papel de plata, que, si se aprieta, vierte automáticamente odio, cobardia, y villania. EL artista, el poeta aprecia el veneno de la masa condensada en un jefe de sección de esta industria.  Es feliz si se le insulta: eso es como una prueba de su coherencia. El autor, el artista elogiado por los periodicos, comprueba la comprensibilidad de su obra: miserable forro de un abrigo destinado a la utilidad publica: andrajos que cubren la brutalidad, meadas que colaboran al calor de un animal que incuba sus bajos instintos, fofa a insípida carne que se múltipla con la ayuda de los microbios tipograficos. Hemos tratado con dureza nuestra inclinación a las lagrimas. Toda filtración de esa naturaleza no es mas que diarrea almibarada. Alentar un arte semejante significa diferirlo. Nos hacen falta obras fuertes, rectas, precisas y, mas que nunca, incomprensibles. La logica es una complicación. La logica siempre es falsa. Ella guia los hilos de las nociones, las palabras en su forma exterior hacia las conclusiones de los centros ilusorios. Sus cadenas matan, minirapodo gigante que asfixia a la independencia. Ligado a la logica, el arte viviria en el incesto, tragándose su propia cola, su cuerpo, fornicando consigo mismo, y el genio se volveria una pesadilla alquitranada de protestantismo, un monumento, una marcha de intestinos grisáceos y pesados.

Pero la soltura, el entusiasmo y la misma alegria de la injusticia, esa pequeña verdad que nosotros practicamos con inocencia y que nos hace bellos (somos sutiles, nuestros dedos son maleables y resbalan como las ramas de esta planta insinuante y casi liquida) caracterizan nuestra alma, dicen los cinicos. Tambien ese es un punto de vista, pero no todas las flores, por fortuna, son sagradas, y lo que hay de divino en nosotros es el comienzo de la accion antihumana. Se trata, aquí, de una flor de papel para el ojal de los señores que frecuentan el baile de disfraces de la vida, cocina de la gracia, con blancas primas agiles o gordas. Esta gente comercio con lo que hemos desechado. Contradicción y unidad de las estrellas polares en un solo chorro pueden ser verdad, supuesto que alguien insista en pronunciar esta banalidad, apéndice de una moralidad libidinosa y maloliente.  La moral consume, como todos los azotes de la inteligencia. El control de la moral y de la logica nos han impuesto la impasibilidad ante los agentes de policia, causa de nuestra esclavitud, putridas ratas de las que esta repleto el vientre de la burguesia, y que han infectado los unicos corredores de nítido y transparente cristal que aun seguían abiertos a los artistas.

Todo hombre debe gritar. Hay una gran tarea destructiva, negativa por hacer. Barrer, asear. La plenitud del individuo se afirma a continuación de un estado de locura, de locura agresiva y completa de un mundo confiado a las manos de los bandidos que se desgarran y destruyen los siglos. Sin fin ni designio, sin organización: la locura  indomable, la descomposición. Los fuertes sobreviviran gracias a su voz vigorosa, pues son vivos en la defensa. La agilidad de los miembros y de los sentimientos flamea en sus flancos prismáticos.

La moral ha determinado  la caridad y la piedad, dos bolas de sebo que han crecido, como elefantes, planetas, y que, aun hoy, son consideradas validas. Pero la bondad no tiene nada que ver con ellas. La bondad es lucida, clara y decidida, despiadada con el compromiso y la política. La moralidad es como una infusión de chocolate en las venas de los hombres. Esto no fue impuesto por una fuerza sobrenatural, sino por los trusts de los mercaderes de ideas, por los acaparadores universitarios. Sentimentalidad: viendo un grupo de hombres que se pelean y se aburren, ellos inventaron el calendario y el medicamento de la sabiduría. Pegando etiquetas se desencadeno la batalla de los filosofos (mercantilismo, balanza, medidas meticulosas y mezquinas) y por segunda vez se comprendio que la piedad es un sentimiento, como al diarrea en relacion con el asco que arruina la salud, que inmunda tarea de carroñas para comprometer al sol.

Yo proclamo la oposicion de todas las facultades cosmicas a tal blenorragia de putrido sol salido de las fabricas del pensamiento filosofico, y proclamo la lucha encarnizada con todos los medios del
 

                                          Asco dadaísta

Toda forma de asco suceptible de convertirse en negacion de la familia es Dada; la protesta a puñetazos de todo el ser entregado a una accion destructiva es Dada; el conocimiento de todos los medios hasta hoy rechazados por el pudor sexual, por el compromiso demasiado comodo y por la cortesia es Dada; la abolicion de la logica, la danza de los impotentes de la creacion es Dada; la abolicion de la logica, la danza de los impotentes de la creacion es Dada; la abolicion de toda jerarquia y de toda ecuacion social de valores establecida entre los siervos que se hallan entre nosotros los siervos es Dada; todo objeto, todos los objetos, los sentimientos y las oscuridades, las apariciones y el choque preciso de las lineas paralelas son medios de lucha Dada; abolicion de la memoria: Dada; abolicion del futuro: Dada; confianza indiscutible en todo dios producto inmediato de la espontaneidad: Dada; salto elegante y sin prejuicios de una armonia a otra esfera; trayectoria de una palabra lanzada como un disco, grito sonoro; respeto
de todas las individualidades en la momentanea locura de cada uno de sus sentimientos, serios o temerosos, timidos o ardientes, vigorosos, decididos, entusiastas; despojar la propia iglesia de todo accesorio inutil y pesado; escupir como una cascada luminosa el pensamiento descortes o amoroso, o bien, complaciendose en ello, mimarlo con la misma identidad, lo que es lo mismo, en un matorral puro de insectos para una noble sangre, dorado por los cuerpos de los arcangeles y por su alma. Libertad: DADA, DADA, DADA, aullido de colores encrespados, encuentro de todos los contrarios y de todas las contradicciones, de todo motivo grotesco, de toda incoherencia: LA VIDA.
 

 

Analisis del Manifiesto Surrealista

El surrealismo entra en escena oficialmente en 1924, con el Primer Manifiesto Surrealista escrito por André Bretón, la publicación del primer número de La Revolución Surrealista y la creación de la Oficina de Investigaciones Surrealistas. Sin embargo, el origen del movimiento puede situarse tres años antes, con la descomposición de los dadaístas franceses, el rompimiento con Tristán Tzara y el acercamiento por parte de Bretón a las teorías freudianas de los sueños y del inconsciente.

Significado de 'surrealismo'

En el Primer Manifiesto, ‘surrealismo’ significa: “Automatismo psíquico puro por cuyo medio se intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral.”

La adopción de la palabra 'surrealismo', explica Bretón, representa un homenaje a Apollinaire, pero con una acepción freudiana; aunque el término ‘supernaturalismo’, utilizado por Nerval, sería quizá más adecuado a las pretensiones del movimiento. Al parecer, Nerval “conoció de maravilla el espíritu de esta doctrina, en tanto que Apollinaire sólo conoció la letra todavía imperfecta del surrealismo, y fue incapaz de dar de él una explicación teórica duradera".

Es interesante pensar en la relación que ambos términos mantienen entre sí . ‘Surrealismo’ se refiere a una sobre-realidad, y ‘supernaturalismo’ a una sobre-naturaleza. Ambas comparten este carácter de más allá, de rebasamiento, pero, ¿cuál es la diferencia entre naturaleza y realidad? ¿Qué une a ambos conceptos?

Apología de la infancia

El manifiesto comienza en tono nostálgico con una crítica a la vida adulta y automatizada. La reivindicación de la niñez como un estado de posibilidades infinitas refleja uno de los temas recurrentes y centrales de esta vanguardia: la inconformidad o las pretensiones revolucionarias funcionan como una puesta en cuestión de los valores culturales y sociales. En palabras de Bretón:

En la infancia, la ausencia de toda norma conocida ofrece al hombre la perspectiva de múltiples vidas vividas al mismo tiempo; el hombre hace suya esta ilusión; solo le interesa la facilidad momentánea, extremada, que todas las cosas ofrecen. Todas las mañanas los niños inician su camino sin inquietudes. Todo está al alcance de la mano, las peores circunstancias materiales parecen excelentes. Luzca el sol o esté negro el cielo, siempre seguiremos adelante jamás dormiremos.

Imaginación sin límites

Un elemento importante, que se rescata con la niñez, es la imaginación. Limitada en la vida adulta por leyes y convenciones prácticas, esta capacidad se subordina a una concepción de la realidad que limita los alcances y las posibilidades de nuestra forma de entender y relacionarnos con el mundo. Bretón aboga por una libertad espiritual suma, mediante la cual podamos “llegar a saber lo que puede llegar a ser". La locura es explorada como una exacerbación de la imaginación; los locos, afirma, son víctimas de su imaginación.

Bretón critica el razonamiento absoluto, los límites a la imaginación o a cualquier otra área de nuestra experiencia. Someter al imperio de la lógica todo lo que hay en el espíritu es reducir nuestra experiencia a un campo muy estrecho: “So pretexto de civilización, con la excusa del progreso, se ha llegado a desterrar del reino del espíritu cuanto pueda calificarse, con razón o sin ella, de superstición o quimera”.

Surrealismo y psicoanálisis

Se reconoce en el trabajo de Freud un punto de partida para el estudio de esa otra parte de la experiencia humana, es decir, aquellas fuerzas ocultas en nosotros mismos que pueden manifestarse a través del sueño o el inconsciente. Bretón se pregunta qué tan reales son los sueños, si se trata de un flujo continuo o si se presentan a nosotros solo como los recordamos, espaciados y en fragmentos; qué relación mantiene con la realidad de la vigilia, si son paralelas, etc.

El afán restrictivo de la ciencia (de la razón científica) no permite que cosas ajenas a lo conocido y a la conciencia, al estado de vigilia, se cuelen en las investigaciones rigurosas: “Por esto, el sueño queda relegado al interior de un paréntesis, igual que la noche. Y, en general, el sueño al igual que la noche, se considera irrelevante.”

Sobre la continuidad del sueño

Para Bretón no hay una razón para dudar de la continuidad de los sueños, al menos tanto como la vigilia, es decir, esa realidad constante a la que atribuimos nuestras certidumbres.

La razón por la que el sueño aparece a nosotros como fragmentado y con lagunas, tiene que ver con la función de la memoria, que se arroga el derecho de hacerlo discontinuo y presentar como seriados los momentos de sueño; olvidando las transiciones, nos ofrece la aparente continuidad de la realidad y la discontinuidad de su opuesto, el sueño.

Se pregunta, además, por qué no “otorgar al sueño aquello que a veces niego a la realidad, este valor de certidumbre que, en el tiempo en que se produce, no queda sujeto a mi escepticismo”, o por qué no podríamos buscar en el sueño respuestas a los problemas fundamentales de la vida.

Vigilia como fenómeno de interferencia

Como confirmación de la reflexión anterior, Bretón nos invita a pensar en la situación en que se encuentra el espíritu. Sujeto a una constante tendencia a la desorientación, actúa bajo el mandato de sugerencias que provienen de “aquella noche profunda”.

No hay un dominio absoluto sobre todo aquello que nos pasa y nos hace efecto. Sin poder encontrar las causas de lo anterior, el espíritu, dice Bretón, recurre al azar. Sin embargo, se pregunta si aquello que no podemos explicar o entender y que atribuimos a la casualidad no es sino ese lazo, aquella cosa que nos vincula al sueño, a esa otra realidad igualmente válida que hemos olvidado y que se ha dejado de lado.

Aire de naturalidad del sueño

La experiencia humana no se limita solo a los eventos de vigilia y debe ser superior a la razón (de la vigilia) que excluye todo lo alógico, para que el sueño pueda, a pesar de extrañarnos en nuestro despertar, aparecer con esa naturalidad que nos lleva a acoger un gran número de acontecimientos y episodios muy raros que nos sorprenden.

El sueño en toda su integridad

Bretón busca un método eficaz para hacer un examen que nos permita tener conciencia del sueño en toda su integridad. Este examen metódico, cuyos medios aún nos son desconocidos, debe crear una armonía entre el estado de vigilia y el de sueño, entre esas dos realidades tan aparentemente contradictorias; una futura conciliación en una especie de realidad absoluta, en una sobrerealidad o surrealidad.

El surrealismo es la búsqueda de esa otra realidad capaz de enriquecer nuestro conocimiento y nuestra experiencia . En tanto movimiento artístico, parte de la crítica de los valores y formas tradicionales que tienden a ignorar esta zona incierta, a restarle importancia.

Bretón reconoce en distintos autores, a través de los siglos, el carácter surrealista: “Cierto es que si únicamente nos fijamos en los resultados, buen número de poetas podrían pasar por surrealistas, comenzando por el Dante, y, también, en sus mejores momentos, por el propio Shakespeare.” Pero, no todos son surrealistas todo el tiempo, afirma, muchos permanecieron fieles a ideas preconcebidas por no haber escuchado “la voz surrealista”.

Tatiana Arce

 

BIOGRAFIA Andre Breton

André Breton (Tinchebray, 19 de febrero de 1896 - París, 28 de septiembre de 1966), escritor, poeta, ensayista y teórico del Surrealismo, reconocido como el fundador y principal exponente de este movimiento artístico.

Biografía

De origen modesto, comenzó a estudiar medicina desoyendo las presiones familiares (sus padres querían que fuera ingeniero). Movilizado en Nantes, durante la Primera Guerra Mundial, en 1916, conoció a Jacques Vaché, que ejerció sobre él una gran influencia, a pesar de haber escrito únicamente cartas de guerra. Entra en contacto con el mundo del arte, primero a través de Paul Valéry y después del grupo dadaísta en 1916.

Durante la guerra trabajó en hospitales psiquiátricos, donde estudió las obras de Sigmund Freud y sus experimentos con la escritura automática (escritura libre de todo control de la razón y de preocupaciones estéticas o morales), lo que influyó en su formulación de la teoría surrealista. Se convirtió en pionero de los movimientos antirracionalistas conocidos como dadaísmo y surrealismo. En 1920 publicó su primera obra Los campos magnéticos, en colaboración con Philippe Soupault, en la que exploraba las posibilidades de la escritura automática. Al año siguiente rompió con Tristan Tzara, el fundador del dadaísmo.

Fundó con Louis Aragon y Philippe Soupault la revista Littérature. En 1924 escribió el Manifiesto del surrealismo y a su alrededor se formó un grupo compuesto por Philippe Soupault, Louis Aragon, Paul Éluard, René Crevel, Michel Leiris, Robert Desnos, Benjamin Péret, deseosos de llegar al «Cambiar la vida» de Rimbaud y «Transformar el mundo» de Marx. «El surrealismo se basa en la creencia en la realidad superior de ciertas formas de asociación desdeñadas hasta la aparición del mismo y en el libre ejercicio del pensamiento. Tiende a destruir definitivamente todos los restantes mecanismos psíquicos y a sustituirlos en la resolución de los principales problemas de la vida». En este manifiesto además se asientan las bases del automatismo psíquico como medio de expresión artística que surge sin la intervención del intelecto.

Muy pronto el movimiento se acerca a la política y en 1927 Aragon, Éluard y Breton se afilian al Partido Comunista. En 1928 publica en París Le surréalisme et la peinture. Con la publicación del Segundo manifiesto surrealista (1929) llegó la polémica: Breton, líder del movimiento surrealista, concretaba la noción de surrealismo y afirmaba que debía caminar junto a la revolución marxista. Sin embargo en 1935 abandona el partido al confirmar la imposibilidad de conciliar la búsqueda de la libertad absoluta de los surrealistas con el realismo socialista que veía al arte como instrumento de propaganda de sus postulados.

Octavio Paz, que conoció a Breton cuando llegó a París en 1946, cuenta que el fundador del surrealismo tenía dos caras. Por un lado era una persona tremendamente vitalista, honesta y de gran simpatía personal, por el otro muy intransigente; no en vano se ganó el apodo de "papa del surrealismo" por la obcecación con la que defendía los principios del movimiento y castigaba con la expulsión a aquellos que se desviaban de su principios morales o artísticos. Entre los expulsados se encuentran Roger Vitrac, Philippe Soupault, Antonin Artaud, Robert Desnos y Salvador Dalí, al que llama "Ávida Dollars" (anagrama de su nombre). Marcel Duchamp le dedica estas palabras No he conocido a ningún hombre que tuviera mayor capacidad de amor, mayor poder de amar la grandeza de la vida, y no se entenderían sus odios si no fuera porque con ellos protegía la cualidad misma de su amor por la vida, por lo maravilloso de la vida. Breton amaba igual que late un corazón. Era el amante del amor en un mundo que cree en la prostitución. Ese es su signo.

La vanguardia española le citó en revistas como Alfar, Grecia, Hélix, Terramar, Art etc. y en 1922, con motivo de la exposición de Francis Picabia en las Galerías Dalmau, estuvo en España. En 1932 escribe Los vasos comunicantes y el libro de poesías La Inmaculada Concepción junto a Paul Éluard. En 1935 visitó Tenerife para asistir a la Exposición Surrealista organizada por la revista Gaceta de Arte, dirigida por Eduardo Westerdahl, lo que supuso un hito en la historia de la creación cultural en Canarias. Sobre esta experiencia escribió el relato Le château étoilé (1935).

En 1934 contrajo matrimonio con Jacqueline Lamba, inspiradora de El amor loco. Dos años después nace su hija Aube. Su obra más creativa es Nadja, en parte autobiográfica. En 1937 inaugura la galería "Gradiva" en la calle de Seine, viaja a México donde conoce a su admirado Trotski y redacta el Manifiesto por un arte revolucionario independiente.

En 1941 se embarca en el Capitaine-Paul-Lemerle hacia Martinica, donde es internado en un campo. Estuvo en una galera repleta de hombres, mujeres y niños, además iba en un lugar más cómodo del barco Claude Lévi-Strauss, con quien mantuvo una durable amistad por correspondencia en la que discutían sobre estética y originalidad absoluta. Durante la década viajó a Santo Domingo, donde ejerció fuerte influencia en los escritores jóvenes y donde participaba en tertulias de intelectuales en la casa de la pareja de inmigrantes alemanes Erwin Walter Palm e Hilde Domin. Liberado bajo fianza llega a Nueva York para un exilio que durará cinco años y publica los Prolegómenos a un tercer manifiesto o no, conocido también como Tercer manifiesto surrealista.

Un año después funda en la ciudad estadounidense de Nueva York la revista VVV. Es en esa ciudad donde conocerá en 1943 a su nueva esposa, la chilena Elisa Bindhoff Enet. Al comienzo de la Segunda Guerra Mundial, vigilado por el gobierno de Vichy, se refugió en América; volvió a París en 1946. En 1956 funda una nueva publicación, Le Surrealisme Même, siguiendo hasta su muerte en 1966 animando al grupo surrealista. Poco antes de morir, decía a Luis Buñuel, hoy nadie se escandaliza, la sociedad ha encontrado maneras de anular el potencial provocador de una obra de arte, adoptando ante ella una actitud de placer consumista. Murió en la mañana del 28 de septiembre de 1966, en el hospital Lariboisière (París). Fue enterrado en el cementerio de Batignolles, a pocos metros de la tumba de su amigo Benjamin Péret. Su poesía, recopilada en Poemas (1948), revela la influencia de los poetas Arthur Rimbaud, Stéphane Mallarmé, Paul Valéry, Guillaume Apollinaire, entre otros.

Obras

Ensayos

  • Los pasos perdidos (1924).
  • Manifiesto de surrealismo (1924, 1930, 1946).
  • El Surrealismo y la pintura (1928).
  • Segundo manifiesto del surrealismo (1929).
  • Antología del humor negro (1940).
  • Prolegómenos a un tercer manifiesto o no (1942).
  • Delito Flagrante (1949).
  • El Surrealismo a través de sus obras (1954).

Poesía

  • Monte de piedad (1919) (Mont de pieté). Con dos ilustraciones de André Derain.
  • Claro de tierra (1923) (Clair de Terre). Con un aguafuerte de Pablo Picasso.
  • Pez soluble (1924) (Poisson soluble).
  • La unión libre (1931) (L´Union libre).
  • El revólver de cabellos blancos (1932) (Le Revolver à cheveaux blancs). Con frontispicio de Salvador Dalí.
  • El aire del agua (1934) (L´Air de l´eau).
  • Al lavadero negro (1936) (Au lavoir noir). Con frontispicio de Marcel Duchamp.
  • Fata Morgana (1940). Con ilustraciones de Wilfredo Lam.
  • Pleno margen (1943) (Pleine marge).
  • Oda a Charles Fourier (1947) (Ode à Charles Fourier). Con ilustraciones de Frederick John Kiesler.
  • Poemas [1916–1948] (1948) (Poèmes).
  • Martinica, encantadora de serpientes (1948) (Martinique, charmeuse de serpents). Con ilustraciones y textos de André Masson.
  • Constelaciones (1959) (Constellations). Con 22 gouches de Joan Miró.
  • Le La (1961) (El la).

Poesía escrita en colaboración

  • Los campos magnéticos (1920) (Les Champs magnetiques). En colaboración con Philippe Soupault.
  • La inmaculada concepción (1930) (L'Immaculée conception). En colaboración con Paul Éluard.
  • Hombres trabajando (1930) (Ralentir travaux). En colaboración con René Char y Paul Éluard.
  • Trébol de cuatro hojas (1954) (Farouche à quatre feuilles). En colaboración con Lise Deharme, Julien Gracq y Jean Tardieu.

Otras obras

  • Nadja (1928).
  • Los vasos comunicantes (1932) (Les Vases communicants).
  • Apuntar del día (1934) (Point du jour).
  • El amor loco (1937) (L´Amour fou).
  • Arcane 17 (1944) (Arcano 17). Con ilustraciones de Maurice Baskine.
  • La llave de los campos (1953) (La Clé des champs). Con ilustraciones de Joan Miró.

 

INTRODUCCION A LAS VANGUARDIAS DEL SIGLO XX

DINAMICA DE LAS RUPTURAS EN POESIA Y NARRATIVA CONTEMPORANEAS

  

Es muy importante tener en cuenta, para analizar cualquier tipo de manifestación artística el contexto histórico, socio – cultural, político y étnico, en los cuales fue producida dicha manifestación, en nuestro caso tomaremos algunos aspectos de la literatura que aparece a principios del siglo XX hasta el presente.

Es entre finales del siglo anterior y los primeros cuarenta años que se producen los grandes rompimientos formales (en tanto estructuras de mensajes) que luego teñirán toda la vida cultural del siglo XX.

Son varios los factores de incidencia, uno de ellos es el romanticismo precedente, que satura el alma de los creadores con modismos que si bien en un principio sirvieron para expresar con fuerza sentimientos contenidos durante generaciones, en determinado momento no eran más que burdas repeticiones de formulas transformadas en clishes que habían perdido su potencia para transmitir con veracidad contenido y emociones de la época.

Así narrativa y poesía debían cumplir ciertos parámetros formales, sin los cuales se suponía que un poema no era un poema, un cuento no era un cuento, una novela no era una novela.

Estos primeros años del siglo se ven teñidos por el ambiente de las dos guerras mundiales sus pre – guerras y sus post – guerras.

Cosas muy a tener en cuenta, por la convulsión social que esto implica, por el sacudimiento de las conciencias sensibles, los movimientos y reacomodamientos que produce en todos los estamentos.

El surgimiento del psicoanálisis, de la mano de su creador Sigmund Freud, que se difunde con fuerza a partir del año 1936, comienza a instalar la idea de un ser humano no tan pautado y ordenado. Sus capas más profundas develan pulsiones no mencionadas en la vida social, pero que ocupan su lugar en el inconsciente y determinan sus mandatos.

De esta manera se podría decir que hay un antes y un después del psicoanálisis, quienes lo toman en cuenta, y visualizan en sus teorías un camino liberador para expresar contenidos, imágenes y emociones profundas y en su estado primitivo, comienzan a utilizarlo como herramienta, y podemos establecer un paralelismo entre la “libre asociación” y el tan discutido mecanismo creativo llamado “automatismo”, que el movimiento surrealista plantea como bandera en su “manifiesto surrealista”, con André Bretón a la cabeza.

Pero indudablemente la compuerta que se abre en el arte del siglo veinte, es aquella que nos permitirá alcanzar, aunque mas no sea en parte, ese sueño, aparentemente inalcanzable de ser libres en el momento irrepetible de la creación.

 

Gloria ARCUSCHIN

Taller Literario NUEVA GENERACION, Julio de 1999